Video Soberania Alimentaria y Comercio Justo
Videoclips de buenas practicas colectivas
septiembre 2011
El video : 9min45
Aquí presentamos los reportajes y vídeo de Soberanía Alimentaria y Comercio Justo realizados por REAS Red de Redes con el objetivo de hacer visible las buenas prácticas « colectivas » de economía solidaria que están teniendo éxito.
SOBERANÍA ALIMENTARIA «Somos lo que comemos»
«Somos lo que comemos». Se trata de una afirmación atrevida pero que no deja de ser cierta. Las formas de obtención de alimentos y los modos de consumo de los mismos son quizás los dos rasgos que más y mejor definen a cada civilización.
Pero ¿qué podríamos pensar de una sociedad que para obtener un kilo de carne destina la misma cantidad de combustibles fósiles? ¿Qué para poner una simple lechuga en la mesa de un consumidor a veces requiere transportarla varios cientos, o incluso miles de kilómetros? ¿Qué para producir y conservar los alimentos más básicos utiliza una enorme cantidad de productos químicos (fertilizantes, pesticidas, conservantes, etc) de dudosa fiabilidad para la salud y el medio ambiente? Se trataría, sin duda, de una sociedad que no parece conceder importancia a la eficiencia energética y que tampoco parece importarle mucho la calidad de los productos que le sirven de alimento. Se trataría de una sociedad, en definitiva, que ha abandonado toda capacidad de decisión real sobre las condiciones de su alimentación. Desgraciadamente ésta es todavía nuestra sociedad.
Sin embargo, hay un espacio para la esperanza: un buen número de síntomas que anuncian vientos de cambio. La explosión de las culturas naturistas y la creciente preocupación social se están manifestando en un cambio general de las actitudes tanto hacia lo qué comemos, como hacia las propias condiciones de la producción alimentaria. Quizás el mejor concepto para designar este nuevo estado de conciencia social sea el de soberanía alimentaria.
Soberanía alimentaria quiere decir que tenemos derecho a saber cómo y qué comemos. Este concepto político convertido en derecho social quiere devolver a las poblaciones de todo el planeta la posibilidad de decidir todo lo referido a la producción alimentaria.
Animados por este espíritu, desde el ámbito de la economía social y solidaria han ido surgiendo numerosas experiencias de producción y consumo que tienen el propósito de generar una alternativa económica al actual modelo de producción alimentaria. SEGUIR LEYENDO…
COMERCIO JUSTO, reinventando los intercambios comerciales
El proceso de globalización económica no es ni mucho menos nuevo. La idea de un mercado mundial ha estado presente a lo largo de la historia pero es a partir del final de la Segunda Guerra Mundial cuando su desarrollo se ha vuelto vertiginoso. El cambio de paradigma económico se debe a una serie de factores que han posibilitado el crecimiento del comercio. La apertura de los mercados bajo el mando del principio de libre comercio, la expansión de las empresas e instituciones transnacionales, el desarrollo de las comunicaciones y de nuevas tecnologías han posibilitado la imposición de un modelo excluyente social y medioambientalmente.
En este contexto internacional, las relaciones comerciales están sus tentadas en la desigualdad Norte-Sur. Los países del Norte, de acuerdo todavía a los esquemas de la etapa colonial, explotan los recursos naturales y humanos de los países del Sur. La relación es completamente desigual: aplican las leyes del libre mercado para eliminar las fronteras comerciales y al mismo tiempo toman medidas restrictivas (aranceles, cuotas a la importación, etc.) para cerrar sus mercados.
Desde 1950 el comercio mundial ha crecido exponencialmente pero, ¿podremos continuar con ese ritmo de crecimiento? Las consecuencias del actual modelo son visibles a diario. A nivel social se puede comprobar, por ejemplo, como las condiciones laborales sobrepasan los límites de la explotación, especialmente en niños y mujeres. En el aspecto medioambiental el deterioro es patente debido a un vasto proceso de cambio climático, cuyas consecuencias apenas se pueden vislumbrar todavía.
Otro de los pilares de nuestra sociedad está apuntalado en nuestro modelo de consumo. Basado en en la norma de «usar y tirar», dentro de este modelo el ciudadano o ciudadana queda relegado al papel de mero consumidor. Cada cual participa de los engranajes económicos en función de su capacidad y actitud para consumir, lo que en definitiva produce situaciones de exclusión social gravísimas.
Para hacer frente a estos problemas, ya sean ecológicos o sociales, es necesario plantearse nuevos paradigmas de intercambio que estén fundado en pautas éticas antes que económicas. El Comercio Justo nace como una reacción al modelo actual del comercio internacional. El Comercio Justo apuesta por una redistribución más equitativa de los recursos y la renta haciendo que los beneficios queden mayoritariamente en manos de los productores. Se trata aquí de producir una transformación social dentro de las economías locales, en contraposición a la expansión de los mercados a nivel mundial con sus consecuencias nefastas y ya conocidas. En palabras de sus promotores:
El Comercio Justo es una asociación de comercio, basada en el diálogo, la transparencia y el respeto, que busca una mayor equidad en el comercio internacional. Contribuye a un desarrollo sostenible ofreciendo mejores condiciones comerciales y asegurando los derechos de productores y trabajadores marginados, especialmente en el Sur. Las organizaciones de Comercio Justo, apoyadas por los consumidores, están implicadas activamente en apoyar a los productores, sensibilizar y desarrollar campañas para conseguir cambios en las reglas y prácticas del comercio internacional convencional.
Fuentes :
Sitio web del Portal de Economia Solidaria www.economiasolidaria.org/